A principios del segundo trimestre, la mayoría de las mujeres se sienten con más energía y las náuseas comienzan a disminuir. La mala noticia es que algunas mujeres experimentan dolores de cabeza. Es importante mantenerte hidratada — el acetaminofén usualmente ayuda. Una gran parte del desarrollo de los órganos del feto se produce en esta etapa y se puede empezar a ver los órganos genitales externos. Si te haces un ultrasonido en este momento, ¡decide de antemano si quieres o no saber el sexo del bebé! A nivel fisiológico, tu volumen de sangre circulante aumentará un 50% de tu nivel de referencia antes del embarazo, de modo que estarás más consciente de los latidos de tu corazón y puede ser que sientas que pierdes la respiración al subir las escaleras (pero continúa subiendo escaleras, siempre y cuando estés saludable -– es un gran ejercicio).
Al final del segundo trimestre, los principales sistemas de órganos han desarrollado su estructura básica, pero el cerebro se mantiene en constante desarrollo. Es posible que te sientas muy bien (sin náuseas ni dolor de cabeza); pero te sentirás más grande. Trata de mantenerte activa, pues esto te ayudará a no sentirte “tan grande”.